Remedios para la Memoria: Katherine Soto

REMEDIOS PARA LA MEMORIA¹

AÑO 3 – NUMERO 6

Agosto 3 de 2010

Santiago de Cali, todos los días, de todos los meses, de todos los años.

Querida Katherine

Recibe un gran abrazo, una mirada, una palabra, te mandamos una memoria, te pedimos una esperanza, esperamos que la justicia sea donde estás y sino allá te sabemos luchando, como aquí luchaste en contra de las injusticias.

Por medio de esta carta queremos contarte cuanto te recordamos, decirte de parte de quienes te amaban, que te siguen amando y cada día mucho más, sabes a cada paso se resalta la valiosa mujer rebelde que decidiste ser, sobre todo cuando en el camino se encuentran personas a quienes enseñaste y de quienes siempre estuviste dispuesta a aprender. También debes saber de nuevos personas que te aman, ellas nunca te conocieron en vida, pero a sus oídos ha llegado el relato de tu compromiso, de tu esperanza, de tus sueños e incluso de tus miedos, por eso han aprendido a amarte desinteresadamente, como a ti te gustaba que te amaran, han decidido mantener tu memoria en ideas y en actos.

Quienes te conocieron y quienes te están conociendo saben ahora de tu amor inmenso por Colombia, saben lo mucho que sufriste por esta patria inmensamente rica, llena de pobreza y represión, en tus propias palabras saben de una “Colombia herida de gravedad, una Colombia que necesita un grito, una palabra, una pinta, una marcha”.

Tu familia nunca te va a olvidar, siempre te amó y te sigue amando, te contamos de su compromiso a luchar contra la impunidad, por Verdad, Justicia y Reparación Integral. Te va alegrar saber que no se dejaron engañar por los militares que te asesinaron, al contrario se llenaron de esa fuerza que brindas y gritaron ¡MILITARES ASESINOS!, ellos prometieron cubrir gastos, indemnizar y hasta pretendieron dar consejos, pero tu mamá y tu hermana asumieron una dignidad que te va a inundar de orgullo, para ellas tu vida es invaluable y tu memoria es un ejemplo.

Tu mascota no aguantó tu ausencia, de tanto recordar, de buscar y llorar, murió de pena moral, murió de tristeza por haberte perdido, es por eso que este año ya no vino a visitarte. La Pacha Mama, la Madre Tierra te vio partir, esa misma naturaleza que tú defendías incansablemente. Tu padre, sin duda te esta abrazando, sabe orgulloso de su semilla rebelde sembrada en ti, sabe que tu voz era su voz, que tus pasos eran su camino, que tus manos eran su palabra, que tu revolucionario amor por el pueblo, la patria y la revolución fueron su herencia.

Finalmente, por ahora, Katherine queremos decirte que otras manos y otras voces, la de tu mamá, tu hermana, tu tío, primos y mascota levantan tus banderas, la de luchar para sanar las heridas de Colombia, la de defender la naturaleza, la de compartir solidaria y desinteresadamente con quienes lo necesitan, la de amar con respeto y alegría a nuestro pueblo hasta transformar esta realidad, cambiando este sistema de injusticia, represión y contaminación.

Recibe nuestro abrazo sincero, vamos a recordarte siempre y vamos a hacer de tu ejemplo una escuela, con amor, tú mamá, tú hermana, tus compañeros de estudio, tus estudiantes y tu pueblo te abrazamos.

1 Boletín de la Fundación Guagua - Galería de la Memoria Tiberio Fernández Mafla